Esta vez el artículo va dirigido a las mujeres y en especial a aquellas mujeres embarazadas o que acaben de dar a luz; aunque otras muchas mujeres también pueden padecen incontinencia urinaria vamos a centrarnos en las que os comentaba.
Antes de comenzar sería conveniente conocer qué es el suelo pélvico. El suelo pélvico es una franja muscular que va desde el pubis hasta el coxis. Su función es la de soportar el peso de la vejiga, recto y útero. Durante el embarazo el suelo pélvico es el encargado de soportar el peso del útero que a medida que vaya creciendo el bebé irá pesando más y el suelo pélvico tendrá que realizar mayor esfuerzo.
En el momento del parto esta franja muscular es el último obstáculo que debe salvar el bebé antes de nacer, provocando en el parto natural una distensión del suelo pélvico.
Entre la distensión que se provoca en el momento del parto y el hecho de no tener que soportar tanto peso el suelo pélvico puede perder su funcionalidad provocando que pueden llegar a crear problemas psicológicos e incluso sociales en la mujer.
Tras el parto poco a poco el cuerpo de manera natural va recuperando su equilibrio pero siempre se le puede ayudar un poco para conseguir una recuperación total. Esta reeducación no es conveniente comenzarla justo después del parto, es aconsejable preguntarle al ginecólogo o a la matrona para que marque cuando puede ser buen momento para comenzar a rehabilitar el suelo pélvico.
Una de las maneras de rehabilitar el suelo pélvico es mediante los ejercicios de Kegel que se basan principalmente en contraer y relajar el músculo pubococcígeo en repetidas ocasiones a lo largo del día. Pero ¿cómo sabemos si realmente contraemos ese músculo? La mejor manera para identificarlo es cortar el flujo de la orina durante la micción. Una vez identificado el músculo a trabajar es aconsejable no realizarlo en el momento de la micción para evitar infecciones.
Es aconsejable comenzar a realizar estos ejercicios ya estando embarazada para reforzar esa zona y también facilitar el parto ya que se producen menos desgarros y episiotomías.
Una vez pasada la cuarentena tras el parto, el ginecólogo y la matrona aconsejan la rehabilitación del suelo pélvico. Además de mediante los ejercicios mencionados en el párrafo anterior existen ejercitadores que pueden ayudar en esta rehabilitación como el que podéis ver en el enlace siguiente:
https://www.ortoweb.com/ejercitador-de-kegel-intimina-kegel
Estos ejercitadores consiste en una bola de peso dentro de otra bola unida a un cordón de para facilitar la expulsión, todo ello de silicona, que hace que cuando está colocada al notar el peso y el movimiento de la bola interna los músculos del suelo pélvico se contraigan. Existen tres pesos diferentes en función del grado de resistencia.
El ejercitador Kegel está indicado en los siguientes casos:
Cualquier mujer a cualquier edad para:
- Prevenir y superar la incontinencia
- Prevenir y reducir los síntomas del prolapso genital
- Tonificar y reforzar los músculos para mejorar las relaciones íntimas.
Futuras madres para:
- Fortalecer y preparar los principales músculos involucrados en el embarazo
- Mantener la continencia urinaria durante el embarazo
- Mejorar la recuperación del suelo pélvico en el postparto
Nuevas madres para:
- Recuperar y restaurar la fortaleza del suelo pélvico
- Fortalecer y tonificar los músculos para aumentar la tensión pélvica
Pre y post menopausia para:
- Prevenir y superar la incontinencia
- Prevenir el prolapso pélvico y los síntomas asociados a la menopausia
Este ejercitador nunca debe utilizarse durante el embarazo ni inmediatamente después hay que esperar a la visita con el ginecólogo o la matrona para que comprueben que todo está correctamente.
Ante cualquier duda o consulta estaremos encantados de informarles.
Un saludo.
María Gaudioso Alonso
Terapeuta Ocupacional
Técnico ortopédico
Diplomada en Educación Especial
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